5 de mayo de 2010

No "adelgazar" para mejorar......

Para obtener un buen rendimiento en un entrenamiento o en una competición, aún teniendo buenas condiciones físicas innatas, no hay que olvidarse de dos asuntos centrales: el descanso y la alimentación.
Haciendo un paralelismo con el trabajo, diría que tampoco se puede evolucionar profesionalmente, aún teniendo talento y preparación básica, si no se recibe la formación adecuada y específica a las necesidades y competencias laborales.
En el mundo de las carreras es bastante habitual confundir la reducción de peso corporal con la posibilidad de un mejor desempeño en el entrenamiento o las carreras..... y uno puede escuchar expresiones como la siguiente: "He bajado dos kilos y ahora voy a volar...."
Bien, mi experiencia demuestra que las cosas no son exactamente así. Mi primera Maratón fue Nueva York. LLegué a la fecha de la carrera con 74 Kilos y un buen entrenamiento, durante el cual no cuide en exceso mi alimentación (fundamentalmente en lo que al equilibrio de la misma se refiere). Comencé esa carera muy bien, rápido, eufórico, pleno de fuerza, pero......... me faltaron las fuerzas en los últimos 10 kilómetros y terminé haciendo 3 horas y 24 minutos, que si bien es un tiempo bueno para una primera maratón, no era el tiempo al que apuntaba cuando comenzó la carrera. Terminé con gran sufrimiento haciendo kilómetros en 7/8 minutos.
El siguiente año volví a correr Nueva York. Entrené mejor y, ante todo, me alimenté muy bien conforme a las recomendaciones de un nutricionista. Llegué a la carrera con 78 kilos, es decir, más pesado, y sin embargo culminé la prueba en 3 horas y 16 minutos, disminuyendo en 8 minutos mi tiempo del año anterior.
Siguiendo con el paralelismo con el trabajo, diría que hay quien compromete todas sus horas disponibles en producir y producir, en el día día, sin darse tiempo para la reflexión, la planificación y el estudio. Obviamente con esa actitud "adelgazas" tus necesidades de tiempo porque te robas el que correspondería al estudio y la formación, pero finalmente el rendimiento profesional, con el paso del tiempo, no mejora pues no se produce la necesaria preparación y actualización de conocimientos que permitan mejorar el desempeño.
Por lo tanto, si queremos seguir corriendo y sintiendo esa maravillosa sensación de mejorar nuestros tiempos, descansemos lo más posible y alimentémonos bien (en Venezuela además eso es un placer).
Y, si queremos evolucionar en nuestro trabajo, no dejemos de "engordar" con estudio y capacitación.

Cuídense!

Raul Baltar